El expresidente Evo Morales, en su programa semanal que se difunde por la radio Kausachun Coca, denunció que el presidente Luis Arce, en persona, ofreció la prórroga de las autoridades judiciales hasta 2027 y desafió al Poder Ejecutivo a que lo procesen por los hechos de 2019.
“Algo quiero que sepa el pueblo boliviano, a mí me ha sorprendido. El Lucho (Arce) en persona había comprometido garantizar la prórroga (de autoridades judiciales) hasta 2027 a cambio de la inhabilitación de Evo”.
Luego se preguntó «¿con qué argumentos?», y continuó. “Recuerden que el vocal del TSE Tahuichi Tahuichi dijo que este año son las primarias, al año, 2025 las elecciones nacionales. También dijeron que cada año solamente pueden garantizar una elección. Este año, entonces, no iban a realizarse las judiciales, al año tampoco. En 2026, subnacionales, tampoco. Entonces el presidente prometió las judiciales para 2027”.
Sin embargo, remarcó que el mandatario puso la condición de inhabilitar a Morales, “porque si Evo no llega a ser candidato, él será presidente, con esa lógica. El mundo es tan chiquito, todo se sabe, los mismos magistrados me están informando, yo no busco información, no hago Inteligencia, los datos me llegan. Ya no saben qué hacer. Una prórroga de tanto tiempo es absolutamente ilegal”.
También destacó que cuando el movimiento campesino bloquea “todo el mundo protesta, y me echan la culpa a mí, tengo casi 13 procesos, y algunos de ellos cerrados y ahora quieren reabrir algunos e iniciar otros. Cuando los citadinos bloquean, nadie protesta”.
“Quieren hablar de 2019, no tengo miedo a ningún proceso, que lo hagan porque yo los gané todos los que tuve. Sigo convencido, que alguien se anime a escribir un libro, ojalá alguien me financie ese texto. Soy el dirigente más procesado de la historia de Bolivia, más perseguido de toda la historia de Bolivia, confinado, exiliado desde la década del 80 hasta ahora”.
Tras una revuelta popular, y luego de la que la OEA confirmó que hubo un fraude electoral en las elecciones de 2019, Morales renunció y salió del país. Por denuncia del MAS, que considera lo ocurrido como un golpe de Estado, encarceló a la expresidente Jeanine Áñez y al gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho. Sin embargo, tras la pelea entre ‘evistas’ y ‘arcistas’, el Gobierno anunció procesarlo para determinar su responsabilidad en lo sucedido.
Aseguró que no tiene “miedo a ningún proceso” y parafraseó al ministro de Justicia, Iván Lima, que lo amenazó con juicios. “Estoy esperando que lo haga, hasta ahora no se inicia ningún proceso, pura amenaza. Abogados en todo el país salen a defenderme”.
Sus acusaciones volvieron a tocar a la familia presidencial. “Uno de los hijos de Lucho dijo que esto va más allá de 2025”, se preguntó si se refería a si Arce buscará autoprorrogarse. “Por qué nos dan esa información. El Gobierno ya lo hizo con los autoprorrogados, y su plan era hasta 2027. Gracias a esa fuerza social, a ese terremoto del movimiento indígena, que se levantó para defender a la Constitución y a la Asamblea”.
Criticó que una Sala Constitucional le hubiera quitado la facultad de interpelar ministros a la Asamblea Legislativa, “Cómo es posible que dos magistrados puedan quitarle atribuciones al presidente del Senado, al Andrónico. Cómo es posible que definan autoprorrogarse. Felicito al movimiento campesino, que ya se lograron las elecciones. Tarde o temprano esto va a generar procesos. Tendrán que devolver la plata que están recibiendo. No sé si están pensando gobernar sólo con los autoprorrogados y anular la Asamblea, como hizo el expresidente peruano Alberto Fujimori con Vladimiro Montecinos (exjefe del Servicio Nacional de Inteligencia de Perú), ambos acabaron en la cárcel”.
En el programa criticó también que por falta de dólares, el Hotel Radisson se irá del país y que asociaciones de importadores de fármacos están en emergencia. “Este tema es gravísimo, en el fondo no hay Estado”, manifestó.