El país ya está electoralizado tempranamente, admitió la alcaldesa de El Alto, Eva Copa, quien finalmente admitió que construye su partido, el Movimiento de Renovación Nacional (Morena) se proyecta como una alternativa de centro porque el país no está para extremos.
“Morena está en proceso de construcción, es un partido que aún está recabando firmas para que pueda ser algo tangible, aún está en construcción, pero, Morena va a ser una de las alternativas, no de una extrema derecha, tampoco de una extrema izquierda, pero, sí algo más progresivo que vaya a ser más amplio”, deslizó la burgomaestre sobre el nuevo partido que construye.
En la segunda quincena de septiembre, Morena recibió la autorización del Tribunal Supremo Electoral (TSJ) de recabar firmas para la constitución como partido nacional. Ahora está corriendo el plazo para conseguir 106 mil firmas en todo el territorio nacional. Hasta el 20 de enero debe conseguir esa cantidad de firmas si quiere figurar como un partido de alcance nacional.
En la precepción de la alcaldesa una de las corrientes que tendrá éxito en el escenario político boliviano será precisamente la que tenga una voz moderada y abierta a atender propuestas y es en esa línea que construye su partido.
“Una de las posiciones más fuertes va a ser el centro, porque la extrema derecha dónde nos está llevando, la extrema izquierda dónde nos está llevando a nada, a solucionar nada, lo que estamos buscando es que sea algo mucho más progresivo, algo que lleve al desarrollo y que dé mayor amplitud que pueda acoger a la diversidad que existe en el país”, dijo.
Eva Copa fue dirigente estudiantil de la Universidad Pública de El Alto (Upea) y en esa condición fue propuesta como candidata a segunda senadora por el departamento de La Paz para el periodo constitucional 2015-2020 (foto). Los conflictos de 2019 la llevaron a ser presidenta de la Cámara de Senadores durante el Gobierno de Jenaine Áñez.
Fue la precandidata más notoria del MAS a la alcaldía de El Alto, pero una decisión personal de Evo Morales la relegó de la candidatura y las organizaciones que la apoyaban decidieron abandonar el masismo y hacer campaña por Jallalla, la organización que le “prestó” la sigla para postular al municipio. Le ganó al MAS y logró 8 concejales de 11. Pero rompió su alianza con Jallalla y eso la dejó con una precaria mayoría en el Concejo.