La acusación formal que presentó el Ministerio Público afirma que el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, es autor de ocho delitos del caso Golpe I. Para sindicarlo se basó en supuestos “contactos” que tuvo con autoridades militares para promover la renuncia de Evo Morales a la presidencia, durante la crisis de 2019.
El documento, al que tuvo acceso este medio, no tomó en cuenta el origen de esos sucesos. Morales se postuló a las elecciones nacionales a pesar de las limitaciones constitucionales que no reconocen la “reelección indefinida” y del voto ciudadano que rechazó su postulación a través del referéndum del 21 de febrero de 2016 (21F). El expresidente se basó en un dictamen del Tribunal Constitucional que pidió que se validen sus “derechos políticos”. En 2021, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) declaró que ese no era un derecho que deba ser protegido.
El 10 de noviembre, Morales renunció a la presidencia en medio de una convulsión nacional. Lo hizo tras anular las elecciones que no pudieron ser reconocidas por la misión de observación de la OEA. Evo se fue a México.
El fiscal Omar Mejillones dijo que Camacho coordinó, mediante Luis Fernando López (quien fue ministro de Defensa en la gestión de Jeanine Áñez) con militares y policías para derrocar a Morales. Para ese fin, sostiene el fiscal en el documento, se pudo establecer que hubo movimiento de dinero. El director de la investigación señaló que “desde 2019 Camacho, siempre mediante López, tuvo contacto con el excomandante de las Fuerzas Armadas (FFAA), Williams Kaliman, quien es buscado por las autoridades judiciales.
Un elemento que la Fiscalía consideró clave, fue que López sostuvo una reunión con Kaliman el 10 de noviembre, poco antes de que el exjefe militar pida la renuncia al entonces presidente Morales. Como prueba clave también presentó un video donde aparece Camacho, quien supuestamente se ufana de haber “cerrado” con policías y militares.
López, a través de su cuenta en la red social X, escribió: “Hagan lo hagan, digan lo que digan, Evo Morales huyó, generó violencia, privó de alimentos y oxígeno a todo un país. Todo por el fraude provocado por el masismo. Pacificamos y dimos certidumbre”.
El diputado Rolando Cuéllar, uno de los portavoces más notorios de la bancada ‘arcista’ del MAS, dijo ayer que el expresidente Evo Morales debería responder por los efectos de la crisis política de 2019 y, en ese contexto, ser encarcelado. “Esperamos que en estas investigaciones sobre el golpe de Estado sea citado Evo Morales; acá no se puede encubrir a ninguna persona, porque Morales es también responsable del golpe de Estado y él tiene que dar la cara. No solo renunció, convulsionó el país; creo que Morales tiene que ser encarcelado también”, señaló.
Manuel Morales, representante del Conade, reiteró que la salida de la Policía y las FFAA a las calles fue por la movilización de la población. “Pongo mis manos al fuego que si intervinieron fue por el clamor popular y no por una orden de Camacho”, manifestó.
La Fiscalía pide 20 años de prisión para Camacho, López (exministro de Defensa) y los generales Williams Kaliman Romero y Vladimir Yuri Calderón Mariscal por de terrorismo, financiamiento al terrorismo, cohecho activo, seducción de tropas, instigación pública a delinquir, asociación delictuosa, uso indebido de bienes y servicios públicos.