La reunión evista del Movimiento Al Socialismo (MAS) comenzó aproximadamente a las 09:30 de este viernes, en la población de Lauca Ñ del Trópico de Cochabamba, para definir el futuro del partido gobernante fraccionado.
Esta reunión se realiza después de que, con polémicos fallos del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), se inhabilitara una nueva candidatura del expresidente Evo Morales e incluso se lo despojara de la dirección del MAS.
Morales, en su discurso inaugural del evento, dijo que en esta reunión se tiene que decidir: “si supuestamente Evo ya no es candidato y (si) Evo ya no tiene partido”.
Es decir, “primero la situación de Evo Morales (porque) somos orgánicos. Si creen que estoy inhabilitado, tocará irme a mi chaco para cosechar tambaquí y para sembrar arroz. Segundo, aquí debemos debatir (…) nuestra sigla: qué hacemos, defendemos, hacemos otro partido o qué hacemos”, dijo.
Insistió que el gobierno de su otrora ministro de Economía y actual presidente, Luis Arce; y de su excanciller y actual vicepresidente, David Choquehuanca, está intentando proscribir al MAS “con apoyo de Estados Unidos”.
“Al movimiento político más grande del país (…) nos quieren quitar sin ser militantes”, agregó.
Sin embargo, también volvió a asegurar que están unidos. “Será Lucho, el imperio, los gringos o los comentarios de algunos periodistas que intentan dividir; (pero) se equivocan, al Trópico de Cochabamba no nos van a dividir ni sindicalmente ni electoralmente”, remarcó.
Incluso, consideró que el país vive “un estado de sitio de facto” por la detención de los bloqueadores y los allanamientos a viviendas de algunos investigados (como el exministro Juan Ramón Quintana).
Entonces, en esta reunión, “al margen de la situación de Evo y del MAS, (también) se va a decidir el futuro de Bolivia, estoy convencido de eso”, apuntó.