Los dos bloques del MAS, arcitas y evistas llevaron su conflicto al XXVIII Seminario Internacional, los Partidos de una Nueva Sociedad, que se realizó en México estos días. Los organizadores del evento tuvieron que solicitar que se abstuvieran de mencionar los problemas internos que tienen porque ese no era el carácter del evento.
“No pueden los compañeros de Bolivia y Perú, poner situaciones internas que ustedes tienen. La obligación política y moral deben abordarse en sus países de origen. Este espacio no es para dirimir controversias internas, respetuosamente, lo decimos”, lanzó el moderador luego de escuchar las intervenciones del vicepresidente, David Choquehuanca y del dirigente Juan Enrique Mamani, del pacto de unidad evista. Este último tuvo que suspender su discurso que duró 2 minutos.
El vicepresidente, en su discurso censuró el caudillismo político y la actual estructura política en los países que quitó la autodeterminación de los pueblos, “este sistema ha creado líderes políticos con privilegios y un culto a la personalidad, dejando a los pueblos sin voz y sin la capacidad de autogobernarse”.
Cuando hacía uso de la palabra, una mujer se colocó a sus espaldas y levantó un cartel improvisado que decía, “David Choquehuanca traidor a los indígenas”, el momento incómodo fue superado por los propios asistentes al evento.
En cambio, Mamani había empezado agradeciendo al Gobierno de México y su presidente, Andrés Manuel López Obrador de haber acogido a Evo Morales en 2019 cuando renunció a su cargo, aunque el dirigente dijo que fue un golpe de Estado que amenazó la vida del exmandatario.
“Día a día la derecha viene articulando y hoy queremos pedir a este seminario que se pronuncie solidarizándose con nuestro comandante Evo Morales Aima”, empezó a arengar, momento en el que el moderador lo interrumpió y le dijo que no era el escenario, “bueno, muchas gracias hermanos y hermanas y quisiera agradecerles y hacerles llegar un abrazo fraterno a todos”, dijo Mamani y se retiró, su intervención duró dos minutos.
Dos días antes, la canciller de Bolivia, Celinda Sosa, también llevó el conflicto entre evistas y arcistas a la ONU, donde denunció una supuesta conspiración interna para desestabilizar al Gobierno de Luis Arce.
Arcistas y evistas tienen un conflicto interno por la repostulación que pretende Evo Morales de la mano del MAS; mientras que los arcistas quieren impedir ese anuncio para que Luis Arce postule a una reelección.