La reciente edición de la feria artesanal de Santa Anita, llevada a cabo en el campo ferial del barrio El Constructor en Tarija, registró un notable movimiento económico de 3,5 millones de bolivianos, según informó el alcalde Johnny Torres Terzo. El evento se destacó por impulsar la reactivación económica en distintos sectores de la comunidad.
A pesar de los desafíos económicos que enfrenta el país, Torres Terzo subrayó los resultados positivos de la feria. Explicó que la escasez de carburantes y otros problemas logísticos impidieron que aproximadamente el 10% de los expositores provenientes de otras regiones del país pudieran asistir. Este contratiempo resultó en una recaudación municipal similar a la del año anterior, aunque el impacto económico para los vendedores fue significativo.
El alcalde también señaló que la feria se desarrolló sin incidentes graves, beneficiando tanto a los artesanos como a los visitantes que acudieron al evento. Durante más de 11 días, artesanos locales ofrecieron una amplia variedad de productos a las familias tarijeñas en un ambiente seguro y organizado.
En términos de seguridad, se implementaron medidas específicas para proteger a los niños. La Secretaría de la Mujer, Familia y Poblaciones Vulnerables distribuyó 2.400 manillas identificativas, lo que permitió realizar la restitución de 9 niños que se extraviaron durante la feria. “No tuvimos reportes de incidentes mayores, y agradezco el esfuerzo de la Guardia Municipal y otras unidades que trabajaron arduamente para garantizar la seguridad”, añadió Torres Terzo.
En esta versión de la feria, participaron 1.500 expositores, una leve disminución en comparación con los 1.637 del año pasado. Adicionalmente, para apoyar a los artesanos locales, la feria se extendió hasta el 11 de agosto, brindándoles más oportunidades para comercializar sus productos y contribuir al desarrollo económico de la región.
