Están varados en la Terminal C del puerto de Barcelona, en España. Son 69 bolivianos que viajaron en un crucero de la naviera Mediterranean Shipping Company (MSC) y que fueron estafados con el visado Schengen. Los familiares de las víctimas denuncian que los afectados pagaron $us 10.000 en Bolivia a una agencia de viajes que les ofreció el viaje y la visa. La Cancillería aún gestiona una salida legal, pero lo más seguro es que sean devueltos al país.
“Fueron estafados por una agencia de viajes por dos situaciones: les vendieron un visado falso y les vendieron un billete de retorno a Brasil que fue anulado cuando ellos ya habían embarcado”, relató a la Televisión Española (TVE) una familiar de una de las víctimas que radica en España.
Se desconoce cuál es la agencia de viajes que hizo la operación para fines migratorios y no turísticos.
Desde Barcelona, los medios de esa ciudad dicen que la mayoría de los bolivianos pretendían quedarse en España para trabajar y que usaron el crucero para este fin. Entre las víctimas hay niños.
El crucero transportó a 1.500 personas y salió de Brasil. Los bolivianos tenían el pasaje a Barcelona, aunque el crucero debía continuar a Croacia, Francia y su destino final era Civitavecchia, el puerto de Roma, en Italia, pues el viaje era parte de un paquete turístico por el Mediterráneo.
En declaraciones a medios españoles, uno de los familiares, Luis Mario Celaya, explicó que los bolivianos “subieron al barco pensando que su visado era legal, pero al llegar a Málaga (España) descubrieron que fueron víctimas de un engaño por parte de la agencia” a la que no identificó.
Por su parte, Florencio Acuña, otro familiar, espera a que su hija y su nieto salgan del crucero. “La empresa (donde él trabaja) me ha llamado porque dicen que dónde estoy, que tendría que estar trabajando. Les pedí que, por favor, me dejaran quedarme porque mis familiares lo están pasando mal”, relató a medios españoles.
Los ciudadanos bolivianos no requerían visado para hacer viajes de hasta 90 días a países que son parte del espacio Schengen. Eso fue posible hasta 2007, cuando entró en vigencia este visado comunitario adoptado por los gobiernos europeos para responder al aumento del flujo migratorio que venía desde Bolivia. Ya entonces, las motivaciones de esas migraciones eran presentadas al amparo de viaje por turismo.
En 2015, el Gobierno boliviano y la Unión Europea (UE) iniciaron negociaciones para suprimir el requisito del visado Schengen para los bolivianos que hagan viajes de corta duración. El asunto se volvió a abordar en 2022 en un diálogo de “alto nivel” en La Paz; sin embargo, actualmente esas negociaciones no han avanzado.
Exhorto diplomático
El Gobierno de Bolivia informó que la embajada en España y el consulado general del país en Barcelona “se encuentran realizando las gestiones pertinentes para atender este caso” mediante “coordinaciones con las autoridades españolas” y con la empresa MSC Cruceros, que es la dueña de la embarcación retenida allí.
No obstante, el Ejecutivo boliviano consideró que es la empresa es la que debe otorgar “una inmediata solución” a los 69 ciudadanos “puesto que su obligación era corroborar los documentos de ingreso o salida a cualquier destino que ofrezca sus servicios” para evitar “este tipo de imprevistos”.
Ayer, la Cancillería no emitió ninguna información sobre la situación de los connacionales. Mientras, desde el interior del crucero, Paul Ibarguengoitia, uno de los pasajeros, relató que el domingo pasado les informaron por megáfono sobre “algunos problemas” con los 69 bolivianos y que el lunes y martes ya no tuvieron más información. Un ciudadano español que abordó el barco con su familia en Málaga y que pretende llegar hasta Italia, detalló que ayer la empresa dejó bajar del barco a los pasajeros que no son bolivianos para que puedan trasladarse por Barcelona.
Según la Policía española, estos casos con visados falsos son frecuentes en aeropuertos -normalmente son repatriados por la misma compañía aérea-, pero no tan habituales en cruceros, con la dificultad añadida de que este tipo de barcos no regresan al país de origen, sino que tienen una ruta marcada de varios días para el resto del pasaje de turismo.
Mientras, los familiares de las víctimas están esperando noticias en las calles de la Terminal C de Barcelona y miran al gigante barco con sus seres queridos -niños incluidos- todos afligidos.
Los familiares de las víctimas hacen vigilia en la Terminal C de Barcelona donde está el crucero con los 69 bolivianos afectados por la visa