María Nela Prada, ministra de la Presidencia y una de las personas más cercanas a Luis Arce, se toma con cierto humor los rumores de su renuncia. «Es falso», dice con una ligera sonrisa. Y explica el origen de esta información que califica de errónea. «Proviene de aquellos que, a través de la mentira, quieren ganar puntos políticamente».
En un diálogo con Influyentes, programa que se emite por EL DEBER Radio, Prada responde de frente al cuestionamiento. «Este tema de que haya crisis de gabinete, lo hemos escuchado casi desde el primer año en el que nosotros asumimos nuestro gobierno» como un intento para debilitar al presidente Luis Arce.
Los ataques se han redoblado esta semana cuando, desde el ala evista, apuntaron a la renuncia tanto de Prada, al ministerio de la Presidencia, como de Iván Lima, a la cartera de Justicia. Para la ministra, esas declaraciones «tienen una intencionalidad política» y no corresponden a la realidad.
Detalla cómo se desarrolla el trabajo al interior del Gabinete. «Podemos debatir sobre muchísimas (…) tenemos puntos de vista sobre cada uno de los temas que se presentan y ahí generamos un debate que siempre me parece sano», explica el trabajo entre ministros.
«Esto no significa para nada una crisis de Gabinete» concluye.
Prada recuerda que su apoyo a Luis Arce se remonta a la época en la que se desempeñaba como ministro de Economía. «Trabajo 17 años con el presidente; antes, cuando era ministro; hoy, cuando es Presidente. No ha habido un solo día en esos 17 años que me haya arrepentido de trabajar de manera conjunta por lo que creo, por lo que lucho, por convicción, por los ideales que tengo al lado de un hombre como en el presidente», sentencia.
Los ataques, entiende, provienen de las filas del evismo ya que estarían dispuestos a cualquier cosa para garantizar la postulación de Evo Morales. En ese sentido, también se pidió el acortamiento del mandato del presidente. Es una resolución emitida por el ampliado de Ponchos Rojos, que saldrán desde el lunes 16 a bloquear diversas rutas en el departamento de La Paz.
«Este tipo de pedidos no le hacen ningún bien a nuestra democracia, menos aún cuando detrás de esto sabemos que hay intentos de desestabilización, de generar confrontación y enfrentamiento nuevamente», afirma la ministra.