La tensión política provocada por la pelea interna del MAS y los posteriores enfrentamientos entre las fuerzas del orden y manifestantes fieles al expresidente Evo Morales, activaron un llamado urgente de la Organización de Naciones Unidas (ONU), mientras que activistas ligados al partido gobernante pidieron la “mediación” de aliados extranjeros, países alineados con la izquierda regional que son afines a la actual administración.
El secretario general de la ONU, António Guterres, manifestó que “sigue de cerca y con preocupación” las tensiones que se suscitan en el país y en medio de que los sectores alineados al líder cocalero han pedido el acortamiento de mandato del presidente Luis Arce Catacora, exigencia que fue rechazada incluso por varios líderes de la oposición boliviana.
“(El secretario General de la ONU) insta a todas las partes a que ejerzan moderación y se abstengan de cualquier acto de violencia”, informó la oficina del político portugués a la prensa. Luego llamó a los actores políticos para que resuelvan sus diferencias por medios pacíficos y con pleno respeto de los derechos humanos”.
Anteriormente, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en un escueto mensaje a través de sus redes sociales, se había limitado a pedir que se investigue el supuesto atentado que pudo sufrir Morales, quien —por su lado— enfrenta varias denuncias penales por abuso a menores y acciones violentas.
Controversial pedido
El activista Édgar Salazar, quien se presentó como presidente de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (Apdhb), envió cartas a los presidentes de Venezuela, Cuba, Nicaragua, México y Colombia para que intervengan en el conflicto social y sean “mediadores en un diálogo” entre el presidente Luis Arce y Morales, que representan a las dos facciones del MAS. De la lista de países elegidos por el dirigente, Venezuela, Cuba y Nicaragua tienen observaciones por la violación de derechos humanos y varios casos abiertos ante entidades de alcance internacional.
“La Asamblea de Derechos Humanos ha culminado de entregar las cartas pidiendo a los embajadores, como organismo internacional, puedan generar un mecanismo de diálogo de mediación entre el presidente Luis Arce y el señor Evo Morales”, afirmó Salazar, quien protagonizó hace un año la toma ilegal de la sede de la APDH de La Paz para sacar del cargo a Amparo Carvajal, la dirigente histórica de esa entidad.
En todo caso, el dirigente argumentó que este pedido se dio ante una necesidad para tener un escenario pacífico, donde las partes en conflicto, tanto el sector ‘evista’ y ‘arcista’, dialoguen para evitar que se produzca mayor violencia.
El diputado Gustavo Aliaga (CC), quien es diplomático de carrera, opinó que el problema que atraviesa el país es de carácter partidario por las rencillas que mantienen Arce y Morales, y no pasa por un problema de política nacional. En ese sentido, espera que los países mencionados y que tienen cercanía con el MAS no intervengan. “No es un problema nacional, es un tema partidario. No puede haber una injerencia o mediación directa en cuestiones domésticas, que no nos tomen por tontos”, opinó.
Aliaga sostuvo que existe un interés de algunos países liderados por gobiernos socialistas para acercar a Arce y Evo, a fin de habilitar la candidatura del líder cocalero en las próximas elecciones generales de 2025. Una de ellas, recuerda, fue la llegada a Santa Cruz de algunos miembros del Grupo de Puebla el 11 de marzo de 2024, cuando impulsaron un foro económico en el hotel Camino Real. “Evo es un genio tratando de jugar con estos países que se ayudan entre sí”, expresó Aliaga en contacto con este medio.
“Bolivia es preocupación”
En tanto que Paúl Coca, analista político, en entrevista con esta casa periodística, planteó tres escenarios ante lo vivido en el país. Señaló que existe una mirada internacional directa que ve a Bolivia como un territorio conflictivo y que no es la primera vez que muestran problemas internos, mientras otros países avanzan hacia el desarrollo.
“Bolivia es una preocupación desde 2019, 2020 y ahora con los bloqueos. Esto hace que compatriotas decidan migrar e invertir en otros países como en Paraguay”, dijo y mencionó que existe una versión del Gobierno que buscará posicionarse jugando el papel de víctima en este caso. La tercera es el discurso de Evo, que pasó a mostrarse como un perseguido político a través de las entrevistas que concedió a varios medios internacionales.
Sobre el papel que países de la llamada órbita socialista están jugando en esta crisis, el expresidente Jorge Tuto Quiroga acusó tanto a Evo como Arce de buscar apoyo de Nicolás Maduro. Señaló que mientras el expresidente usaba vehículos dotados por Maduro, Arce se reunía con él en Rusia, durante la reunión del Brics.
El diputado Óscar Balderas (CC) pidió, luego, al TSE que aclare si hubo o no injerencia de Venezuela en el MAS.