La escasez de diésel ya no solo aqueja a los transportistas, ahora también a grandes municipios, como La Paz y El Alto, que en las últimas horas anunciaron que habrá recortes en el servicio de recolección de basura, y pidieron a la ciudadanía reducir al máximo la generación de residuos y no sacar la basura a las calles.
“Debido al desabastecimiento de combustible (diésel), los servicios de recolección y transporte de residuos sólidos, lavado de vías y mercados; barrido mecanizado y recolección de restos de poda, están siendo afectados en su normal prestación”, dice un comunicado que emitió el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz.
Es por eso que la Alcaldía paceña pide “reducir al máximo la generación de residuos sólidos y restos de poda en sus hogares y negocios (…) y evitar el rebalse de los contenedores hasta que la situación se normalice”.
Pero, la falta de combustible no solo afecta al recojo de basura, sino también al servicio de los buses municipales de transporte público, como el PumaKatari y los ChikiTiti, que -en caso de persistir la escasez de diésel- “las afectaciones pueden ser más fuertes”, según funcionarios de la Alcaldía paceña.
En tanto, desde la Alcaldía de El Alto se emitió similar pedido a la ciudadanía alteña, el de tener la basura en casa y no dejarla en las calles porque desde la empresa Trébol, que es la encargada de recoger la basura en ese municipio se ha informado que por falta de diésel no pueden cumplir sus recorridos con normalidad.
“Tal vez en algunos horarios no va a pasar el carro basurero, porque queremos en estos momentos poder administrar de la mejor forma el combustible, la cantidad de diésel que tenemos”, afirmó la vocera del municipio alteño, Beatriz Zegarrundo, citada por Erbol.
Por su partes, a través de sus redes sociales, la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) difundió un comunicado en el que asegura: “La empresa de aseo Trébol, que presta los servicios de recojo de residuos en la urbe alteña, cuenta con la autorización para el retiro de diésel oíl desde la Planta de Almacenaje de Combustibles Líquidos de Senkata”.
La falta de diésel en Bolivia es una constante, que en los últimos meses afecta a todo el sistema de transporte nacional y de carga internacional. A pesar de los anuncios del Gobierno de que la escasez es estacional, las largas y constantes filas en los surtidores demuestran lo contrario.
El miércoles, el presidente de YPFB, Armin Dorghaten, aseguró a EL DEBER que no hay falta de diésel, sino que el problema es su carga y posterior despacho.
“En este momento estamos con tres buques parados en Arica esperando que las condiciones climáticas mejoren. No es que no hay diésel, estamos en un 78% del total de la oferta y se nota un efecto cuando falta un poco de combustible sea un 5% o 7%, ya vemos largas filas, donde el transporte se vuelca a las calles para garantizarse el combustible”, aseguró Dorghaten.
Según el funcionario de la estatal petrolera el problema por la falta de diésel se solucionará este viernes o a más tardar este fin de semana, “Hasta el viernes o el fin de semana calculamos que ya tendremos los cupos completos, para que no hay filas en los surtidores”.