El Gobierno tiene el organigrama del supuesto “grupo criminal” que intentó tomar el poder a la fuerza el pasado 26 de junio. Esta estructura está conformada por 34 personas entre personal militar activo y pasivo y también civiles, todos al mando de Juan José Zúñiga. Algunas esposas de los militares involucrados dicen que Zúñiga los llevó y obligó a ir con mentiras a plaza Murillo.
“Estamos en la certeza de haber descubierto una asonada criminal que por lo menos está conformada por 34 personas que forman parte del estamento militar activo, del estamento militar jubilado y de personas particulares”, detalló el viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera.
La autoridad, quien fue excomandante de la Policía Boliviana, indicó que su afirmación tiene sustento en el hecho de haber demostrado que estas personas utilizaron material militar para actividades de orden particular. Además, el viceministro confirmó que existen hasta ahora 21 detenidos por esta acción militar y que ya se procedió a investigar a otros involucrados, entre ellos civiles y exmilitares.
Ayer, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, dijo que Zúñiga tenía la intención de conformar un gabinete ministerial y que tiene los nombres que el exgeneral iba a designar en caso de haber llegado al poder.
Reclamo de esposas
Jimena Silva es esposa de Luis Domingo Balanza, militar que está en el grupo de detenidos. Ella dijo que su marido fue engañado por Zúñiga y le obligó a ser parte del asalto militar en plaza Murillo. Además, Silva reclamó que recibe amenazas de gente anónima.
“Se están metiendo con nuestros niños, con nosotros, porque nos dicen: hablan o dicen algo. Nos están cerrando puertas”, aseguró Silva. Ella, además, dijo que recibe llamadas anónimas en las que le advierten que matarán a sus hijos si habla algo.
Silva es madre de tres hijos. Hasta ayer esperaba llorando sentada junto a su suegra en las puertas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) para ver si llegan noticias de Balanza.
Balanza, un mando militar con más de 15 años de carrera, está entre los 21 detenidos después de que un grupo de uniformados y vehículos blindados arremetieran contra el Palacio de Gobierno.
Silva y su madre aseguraron que su familia quedó económicamente devastada y sin ingresos para hacerse cargo de tres niños. La familia es una de las que defiende que su padre estaba simplemente siguiendo órdenes, que le requirieron que se saliera de un curso que estaba tomando vía virtual y que se dirigiera a la plaza Murillo.
“¿Cómo vamos a alimentar a nuestra familia?”, dijo la madre de Balanza, quien pidió no ser identificada por las amenazas que dijo haber recibido. “Estoy preocupada por el futuro de mi hijo ¿Qué futuro puede tener alguien que ha sido implicado, alguien que ya ha sido manchado?”, cuestionó.