El músico y productor boliviano, Vladimir Suárez, ganó su segundo Grammy. La trayectoria de este artista le ha valido el reconocimiento y autoridad suficiente para hablar de éxito. Este martes habló con EL DEBER Radio y reveló el secreto de su éxito.
El artista, desde Los Ángeles, cuando allá eran cerca de las 4 de la madrugada, aseguró que aún está emocionado por la distinción recibida.
Los premios Grammy son una distinción otorgada por la Academia Nacional de Artes y Ciencias de la Grabación de Estados Unidos para dar reconocimiento a un logro especialmente destacado en la industria musical.
En ese marco, Suárez comentó que, desde hace años forma parte de la Academia, pero recién el 2022 ganó su primer reconocimiento con el Grammy Latino. Dos años después se hace del Grammy.
«El proyecto es de un artista colombiano, 1 2 3 Andrés, y nos contactó para hacernos cargo de la producción musical. El equipo estaba conformado por Raniero Palm (de Venezuela), Vladimir Suárez (de Bolivia) y Leandro Álvarez (de Argentina), éramos los únicos latinos en una terna de cinco nominados, en la categoría de mejor álbum de música infantil», relató Suárez.
Hay que aclarar que en los Grammy es una competición donde ingresan 25.000 proyectos, «por lo que estar entre los cinco nominados ya es una gran satisfacción y haberlo hecho entre estos colegas es un gran logro», sostuvo.
Antecedente
Dicen que «lo que se hereda no se hurta» y en efecto. Vladimir Suárez proviene de una familia de artistas. «Mis padres, el dúo Guajojó, son los culpables que yo haya incursionado en este ámbito», comentó.
Es por ello que afirma estar muy agradecido con su tierra natal, Santa Cruz, donde incursionó y formó en la música.
«Yo agradezco mucho a mi tierra, porque me dio las bases para defenderme afuera, con buenas armas, estudié en el Instituto de Bellas Artes; y de hecho, estoy en la casa de profesores muy queridos, que comenzaron el Instituto y ahora me tienen como un hijo adoptivo», sostuvo.
Según indicó, «lo que aprendí allá me ha servido para estar con grandes personajes y tener un buen nivel. He producido diferentes proyectos, no solo en el ámbito infantil».
Sin embargo, no todo ha sido fácil. «La idea es animarse a hacer las cosas, es complicado abrirse las puertas, la carrera de un artista es complicada, difícil, porque a veces esperamos que instituciones locales o empresas puedan apoyarnos y muchas veces no se da. Pero el detalle ahí está en ser terco, no importa con o sin ayuda voy a salir adelante y a la hora de la hora todo se da, porque los sueños tienen que ser más grande que cualquier obstáculo».
Para el productor musical, en Bolivia hay demasiado talento. «El chiste es animarnos y trabajar, no hay otro secreto».
Política
Cuando Suárez ganó su primer Grammy, en Santa Cruz se desarrollaba el paro por 36 días exigiendo el Censo de Población y Vivienda. De ahí que tras recibir el reconocimiento, él mismo se encargó de desarrollar una canción con el grito de protesta de esa época.
“Quién se cansa, nadie se cansa; quién se rinde, nadie se rinde”, fue una canción y es el secreto de cualquier meta, de no cansarse, que en esa ocasión fue unida a una protesta», resaltó el artista.
Contó que él siempre ha estado pendiente de lo que sucede en Bolivia, tanto en el ámbito artístico como en lo político.
«Siempre he tenido la seguridad y certeza que el artista tiene que estar empapado de su país. Y cuando hay que levantar la voz, por lo que uno quiere, hay que hacerlo», subrayó.
«Siento que está muy frágil la parte política de nuestra tierra, siento que para crecer tenemos que cambiar de raíz muchas cosas que han corrompido nuestra política porque nuestra gente no es así, pero lastimosamente por dos o tres llegamos a situaciones tristes», manifestó y agregó que, «como todo ciudadano y ser humano lo expreso, no me callo».
Sobre sus proyectos, adelantó que «hay muchos proyectos con artistas bolivianos, que van a salir de a poco. Estamos con el grupo Sofía y estamos coordinando para trabajar con la musicalización de un corto, que van a inscribir a Cannes; y pues apuntamos a los Óscar con la música».