Hace una semana, en un barrio de Bermejo, en el departamento de Tarija, se hallaron 33 kilos de cocaína enterrados en una vivienda. La droga estaba en un yute y según la investigación policial en ese patio había más huecos que antes fueron utilizados para guardar la sustancia controlada. Esa droga luego pasa a la localidad argentina de Aguas Blancas cargada por los bagayeros, quienes en su mayoría desconocen los productos que llevan por el río Bermejo hacia el vecino país.
La Unidad Móvil de Patrullaje Rural (Umopar) en Bermejo tiene información de casas donde “guardan” la droga mientras las mafias hacen el operativo para pasarla a Argentina. Ya son tres casos que atendió la Policía en algunos barrios de la localidad fronteriza.
“La bolsa de yute blanca contenía 20 paquetes en forma de ladrillo, forrados con cinta masquin de color amarillo. Tras realizar la prueba de Narco Test, se confirmó que el contenido era clorhidrato de cocaína. De manera similar, otra bolsa de yute color rojo tenía 12 paquetes en forma de ladrillo y forrados con la misma cinta amarilla. La prueba de Narco Test en estos paquetes también resultó positiva para clorhidrato de cocaína”, es parte del informe de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) sobre el último caso donde se halló droga enterrada en una vivienda.
En ese operativo, se incautaron 32 paquetes de clorhidrato de cocaína con un peso total de 33 kilos y 775 gramos. El informe detalla que hay una persona aprehendida con el nombre de Gloria G., de 37 años, quien se encontraba en el domicilio. Además, se procedió al secuestro de dos vehículos: un Nissan blanco con placa de control 205-GTU y un Toyota blanco con placa de control 656-LPY.
Andrés Torres, asambleísta departamental de Tarija y que representa a Bermejo, expresó su preocupación por el incremento de la inseguridad en la localidad fronteriza, lo que desembocó en hechos de crimen organizado y la presencia de mafias internacionales. La autoridad pide al Gobierno asumir medidas inmediatas, ya que la Policía cuenta con escasos efectivos en esa ciudad.
“Lamentablemente, Bermejo se ha convertido en un lugar de recepción del narcotráfico del interior del país que busca pasar la droga a la República de Argentina. Tememos que dejemos de ser una ciudad de paso para convertirse en una ciudad de consumo, por lo que pedimos fortalecer la seguridad. Ya no hablamos de robos de motocicletas o cosas, sino de ajustes de cuentas que son propias de las mafias que se mueven con las drogas”, lamentó Torres.
Ajuste de cuentas
Hace un mes, en Colonia Santa Rosa, en el lado argentino, fueron hallados al costado de la carretera RN 34 dos cuerpos. Los identificaron como oriundos del departamento de Tarija. Uno de ellos era de la ciudad de Bermejo.
Según la investigación policial de ambos países, los hombres fueron asesinados por un ajuste de cuentas. Ambos vivían en Bermejo y se confirmó que en el patio del domicilio de uno de ellos había pozos que eran utilizados para guardar la droga.
“Acá (en Bermejo) está creciendo mucho ese tipo de estrategia del narcotráfico. Utilizan viviendas para ocultar los paquetes de cocaína. Guardan la sustancia controlada por un día hasta que reciben órdenes para pasarla al lado argentino. Lamentablemente, la mayoría utiliza a los bagayeros para pasar esa droga, pero también sabíamos que muchos de ellos (bagayeros) saben lo que están llevando”, informó un efectivo policial a este medio.
“Nosotros no sabemos lo que hay adentro de las bolsas. Apenas las cruzamos. Nosotros no podemos decir al dueño de la mercadería que abra todas sus cajas para verificar qué hay ahí dentro, nosotros no somos policías. Pero sabemos también que entre nosotros hay malos bagayeros que llevan droga, que saben que llevan droga y que trabajan directamente con las mafias de la frontera”, relató Rubén, un bagayero de Bermejo.
En 2023, Adelaida Castillo, una argentina conocida como la “Reina Titi”, ingresó a una cárcel argentina por ser considerada una de las figuras pesadas del narcotráfico en ese país. Castillo tenía una estrecha relación con un grupo de bagayeros en Yacuiba y Salvador Mazza para que pasen la droga boliviana al norte argentino. También tenía operaciones en la ciudad de Bermejo.
La “Reina Titi” manejaba los bagayeros en la frontera caliente en Salvador Mazza, Argentina, y Yacuiba, Bolivia. Tenía todo el control de todo lo que pasaba en las espaldas de los bagayeros. Muchos de esos bultos tenían kilos y kilos de cocaína y pasta base.
Los expertos aseguran que las grandes organizaciones colombianas, bolivianas, peruanas y mexicanas se están infiltrando entre los bagayeros y que muchos de éstos caen en redadas sin saber que están cargando en sus espaldas y por cobrar unos pesos más.
En el norte argentino se concentra más del 60% de las causas judiciales por narcotráfico de toda Argentina. Muchos de los detenidos son bagayeros, pero salen libres porque demuestran que no sabían que llevaban droga. Ellos descargan los bultos que llegan en gomones desde el lado boliviano.