Una denuncia de supuesta tortura preocupa a la población de Yacuiba, frontera entre Bolivia y Argentina. El que dio a conocer el hecho a la opinión publica fue el abogado Alex Gutiérrez, que presentó cargos ante el Ministerio Público por la presunta agresión y tortura de su cliente de nacionalidad argentina, Yamil Espíndola Mejía. Los acusados son policías bolivianos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc).
La víctima afirma haber sido brutalmente agredido en instalaciones policiales, luego de su arresto en cercanías del paraje El Sauzal, municipalidad de Salvador Mazza, Argentina.
El incidente, que supuestamente ocurrió el sábado 14 de septiembre, ha provocado la preocupación ante el posible abuso de autoridad y violación a los derechos humanos en Yacuiba.
Según Gutiérrez, su cliente fue «pateado en la zona de los testículos», pero además presenta hematomas en distintas partes del cuerpo, resultado de la golpiza que habría durado más de una hora.
Espíndola, que fue detenido por sospecha de robo, relató este lunes las agresiones sufridas. «Intentaron quitarme el aire con una bolsa en la cabeza», aseguró en conferencia de prensa a medios yacuibeños.
Agregó que fue arrestado en el lado argentino, «me apuntaron como ladrón y como el cabecilla de los robos en este lado de Bolivia”, explicó.
Espíndola describió las supuestas torturas a las que fue sometido, incluyendo golpes en la cabeza y asfixia con una bolsa. «Me tuvieron por dos horas arrestado; querían que yo me declare culpable de todos los hechos de robo», aseguró la víctima, quien añadió que su detención ocurrió alrededor de las 8:45 de la mañana del anterior sábado.
El hombre tiene dos hijos pequeños y una esposa de nacionalidad boliviana embarazada. Asegura que ha trabajado durante cinco años en Bolivia y que en el momento del incidente se dirigía a su vivienda en el lado argentino de la frontera, zona El Sauzal.
Según su relato, fue acusado del robo de una motocicleta que, supuestamente, fue llevada al lado argentino. La situación se agravó cuando su esposa, al llegar a la Felcc, también habría sido agredida. Pese a estar en gestación, recibió un golpe en el estómago.
Investigación en curso
El abogado Alex Gutiérrez ha exigido que se identifique a los autores de la supuesta agresión y que se tomen las medidas necesarias contra los policías implicados.
«Vamos a pedir al Ministerio Público que dé con la identificación de los autores, policías que hayan estado de servicio ese día», señaló Gutiérrez. La esposa de la víctima solo reconoció a un efectivo de nombre Ever M.
El caso llamó la atención de las autoridades defensoriales
El coordinador de la mesa defensorial, Walter Portillo, aseguró que se abrirá una investigación de oficio. «No importa la nacionalidad de las personas, todos somos seres humanos, no deberíamos recibir ningún trato cruel o tortura», afirmó Portillo, agregando que la tortura es un delito penal que conlleva la cárcel, especialmente cuando es cometida por funcionarios públicos.
La denuncia ha generado un debate sobre los límites de la acción policial en zonas fronterizas y ha reavivado preocupaciones sobre los derechos humanos en la región.