“Se ha dado por finalizada la condición de refugiado de Juan Evo Morales Ayma. Fin”. Con ese escueto mensaje publicado en su twitter, el vocero presidencial, Manuel Adorni, daba un sorpresivo anuncio. No aportó ningún argumento ni justificación más. Solo ese «fin».
Tweet de Manuel Adorni
Morales renunció al cargo de presidente de Bolivia el 10 de noviembre de 2019. Dos días después salía del país con destino a México, país que validó en primera instancia el asilo político al expresidente.
El 12 de diciembre de 2019, Morales se trasladaba a Argentina. En Buenos Aires, y con el aval del entonces presidente argentino, Alberto Fernández, se instaló en Buenos Aires. Llegó al vecino país junto a Álvaro García Linera y la exministra de Salud, Gabriela Montaño.
En su momento, el entonces canciller de Argentina Felipe Solá explicaba la situación legal. “Evo Morales, su vicepresidente Álvaro García Linera, su excanciller, la exministra Montaño y el exembajador de Bolivia ante la OEA aterrizaron esta mañana en el país. Les he dado asilo político para que entren y ellos luego pidieron ser refugiados. En las próximas horas, cesará la condición de asilo y asumirán la de refugiados”, afirmó.
Ya en Buenos Aires, Morales capitaneó la campaña del MAS rumbo a las elecciones de 2020, en las que se impuso Luis Arce.
Con el apoyo del gobierno de Fernández, Evo mantuvo se mantuvo activo tanto con la comunidad boliviana como con la realidad política del país que lo recibió.
El 9 de noviembre de 2020, ya con Arce en la presidencia, Morales ingresó al país por Villazón.