Con el mensaje presidencial en duda ante la Asamblea, el Gobierno ultima detalles del espectáculo que están preparando para este viernes 8 de noviembre, jornada en la que se dará inicio al último año de gestión de Luis Arce y David Choquehuanca. El festejo asoma para los arcistas que invitaron a sus organizaciones.
La tarde de este jueves, la plaza Murillo fue cerrada a la circulación vehicular y tres gigantescos camiones de la empresa BJ-Sonido descargaron toneladas de fierros de al menos tres escenarios gigantescos y fueron emplazado en la principal plaza de armas de La Paz.
“Vamos a cumplir con la presentación de un informe como corresponde y manda la Constitución, a partir de ello vamos a ir evaluando también”, dijo en forma evasiva la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón cuando los periodistas le consultaron si el mensaje presidencial sería ante la Asamblea.
De acuerdo con los funcionarios del Legislativo, la orden fue preparar dos actos oficiales, el primero que estará a cargo del vicepresidente David Choquehuanca, quien debe inaugurar el nuevo periodo legislativo; mientras que el segundo acto que será en la Casa Grande del Pueblo desde donde emitiría si mensaje Luis Arce.
La decisión habría sido tomada ante la advertencia de la bancada evista en la Cámara de Diputados, cuyos legisladores dijeron que no permitirán sesionar a la nueva directiva encabezada por Omar Yujra.
El ajetreo en la plaza Murillo seguía la noche de este jueves con el armado de las tarimas que recibirán la visita de invitados que planifico el Gobierno.
Los disputados arcistas creen que existen razones para el festejo después del ataque político de Evo Morales qué mandó a cerrar los caminos casi por un mes, el mismo que se cayó y el líder. masista tuvo o que ensayar un “cuarto intermedio” en su medida que ya pedía fuerza.
El viceministro de coordinación con los Movimientos Sociales, Juan Villca, dijo que enfrentaron tres ataques del evismo este año, primero con el bloqueo de febrero por la autoprorroga de los magistrados de Sucre y que no tuvo los efectos que buscó Morales.
El segundo, la marcha del 17 al 23 de septiembre qué protagonizó el propio Morales y que arrincono al gobierno, aunque tampoco tuvo resultados; finalmente este bloqueo de 24 días que tampoco tiene resultados.
Los arcistas esperan el mensaje de Arce desde la Casa Grande del Pueblo para evitar más bochornos en la Asamblea, hasta donde llegan incluso invitados del cuerpo diplomático. Sin embargo, el gobierno lanzó la invitación a sus organizaciones para “festejar” el último año de Luis Arce.